Morrissey siempre habla de la monarquía inglesa, los derechos de los animales, el matrimonio entre personas del mismo sexo y de casi cualquier tema. Ahora le ha dedicado algunas palabras a la política estadounidense, específicamente al presidente Barack Obama y la candidata presidencial Hillary Clinton.
«Obama me ha desconcertado porque no parece apoyar a las personas negras cuando más lo necesitan… Ferguson es un ejemplo obvio», dijo el ex cantante de The Smiths a Alternative Nation. «Si Michael Brown hubiese sido una de las hijas de Obama, no creo que estaría insistiendo en que la Nación apoye a las llamadas fuerzas de seguridad».
Morrissey llegó a sugerir incluso que «Obama parece ser blanco en su interior», y que el presidente no entiende «lo que significa ser negro». Por supuesto, Morrissey estaba listo y dispuesto a ofrecer su propia visión.
«Obama parece ser blanco en su interior. Hay una división racial evidente en los Estados Unidos y está explotando, y Obama no apoya nunca a la gente negra inocente que es asesinada por policías blancos que nunca tienen que rendir cuentas. Uno esperaría que sea más comprensivo de lo que significa ser negro. Pero hasta ahora, no lo ha sido. No tiene sentido continuar diciendo que debemos apoyar a la policía cuando es obvio para todo el mundo que la policía en los Estados Unidos está fuera de control».
Morrissey también dirigió sus críticas a la ex Secretaria de Estado, Hillary Clinton, al parecer alegando que las únicas mujeres con las que estaría compitiendo en la elección 2016 serían una serie de testaferros de conservadores extremos (uno de los cuales nunca ha ocupado la Presidencia).
«Yo critiqué a Hillary porque ridiculizó a Obama en la primera contienda electoral, y pensé que era bastante bajo viniendo de ella», dijo Morrissey. «Ahora creo que ella es una gran candidata para la presidencia, y en realidad, no tiene competencia».
«Cuando nos fijamos en las otras mujeres del circuito político estadounidense… Michelle Bachmann, Ann Coulter, Sarah Palin… todas ellas van mucho al frente, pero Hillary ahora parece más tranquila y medida», continuó. «Pero una mujer presidente no necesariamente cambiará nada porque, como con Margaret Thatcher, si sale mal, la gente nunca más permitirá que una mujer esté al mando».