La historia de Orions comienza oficialmente en 1968, bajo el nombre de Orion;s Beethoven. Tras publicar dos álbumes -«Superángel» (1973) y «Tercer milenio» (1977)- el grupo acorta su nombre y su sonido abandona el rock progresivo y sinfónico de los años 70.
Su primer disco como Orions, «Volando alto» (1982), fue registrado en los estudios ION de Buenos Aires. Participaron de la grabación los músicos Adrián Bar (guitarras eléctricas y acústicas, guitarra slide y coros), Ronan Bar (bajo eléctrico, bajo fretlees y voz), José Luis González (batería y percusión), Alberto Varak (voz) y Horacio Varbaro (piano, órgano Hammond, mellotrón y sintetizadores). Los coros adicionales estuvieron a cargo de Ricardo Leiva y Dery Scalise.
Todos los temas del álbum fueron compuestos por Adrián y Ronan Bar.
«Volando alto» fue editado originalmente en LP y cassette por el sello independiente V.B. Records y distribuido por DBN.
De este álbum sobresalió su más grande éxito: «Hasta que salga el sol». Como gran parte de los discos de rock argentino publicados en 1982, recibió un gran impulso por la prohibición impuesta por la Dictadura Militar de emitir música en inglés en las radios, durante la Guerra de Malvinas. Otras canciones que también se escucharon en las radios, aunque con mucha menos rotación, fueron «Nacida para perder» y «Sigo dando vueltas».
El LP fue presentado en noviembre de ese mismo año con gran éxito en el festival B.A.Rock IV.
En 1983 Carlos D’Arias reemplaza al baterista José Luis González, quien murió en un accidente. Ese mismo año sale a la venta «Asfalto caliente», que no obtuvo la misma repercusión que su antecesor, y la banda entra en una lenta degradación interna que los llevaría al final. El grupo se separó el 30 diciembre de 1983, luego de un último recital en el estadio Obras.