El guitarrista fundador de Thin Lizzy, Eric Bell, ha llamado «pandilla de bastardos» a los miembros de Metallica por no haberle pagado por actuar con ellos hace ya más de veinte años.
Bell fue invitado a tocar ‘Whiskey in the Jar’ con Metallica en un concierto en el Point Theatre de Dublín el 5 de julio de 1999 y, aunque la actuación fue fenomenal, el desenlace no lo dejó conforme.
La banda californiana se encargó de trasladar al guitarrista desde Inglaterra hasta Dublín en su avión privado, y en el viaje de vuelta Bell esperaba recibir las 2.000 libras (2.500 dólares) que le correspondían.
A pesar de que no habían llegado a un acuerdo concreto sobre su tarifa, pensó que iba a recibir el pago cuando un miembro del equipo de Metallica se le acercó para despedirlo en el avión privado.
«Eran como las tres y media de la madrugada. El transporte estaba preparado y había un coche para llevarme a casa», relató a The Irish Sun el que fuera guitarrista de Thin Lizzy desde su fundación en 1969 hasta finales de 1973.
Y agregó: «Estaba esperando pacientemente dos de los grandes, lo que no hubiera significado nada para ellos. Pero me entregaron una gran bola de remeras, llaveros y gorras de Metallica. Así me pagaron todo y luego se fueron a la mierda».
Según Bell, no fue hasta que se sentó en el automóvil camino a casa cuando se dio cuenta de que no le habían pagado. «Pensé que recibiría algo en el correo, pero tampoco», indicó.
«Más tarde, alguien intentó ponerse en contacto con Metallica para conseguirme algo, pero lo encontraron imposible y se dieron por vencidos», explicó.
Por todo esto, termina arremetiendo contra la banda de San Francisco: «Son una pandilla de bastardos. No podía creer lo que hicieron, especialmente porque les va tan bien. Me debieron haber pagado 2.000 libras, pero no lo hicieron».
«Si Metallica alguna vez me pidiera que volviera a tocar con ellos nuevamente, pediría 5.000 dólares por adelantado. Y en efectivo para saber que lo tengo en mi bolsillo», remató.
Bell termina asegurando que nunca ha escuchado en realidad la versión de Metallica de ‘Whiskey on the Jar’, la canción folk irlandesa popularizada por Thin Lizzy en 1973 y en la que él se encarga del famoso riff y el solo de guitarra.