Otis Rush, fundador del sonido del blues de Chicago, falleció este sábado (29 de septiembre). Su muerte, a los 84 años, fue anunciada en su sitio web oficia por su esposa, Masaki Rush.
El legendario músico estuvo inactivo durante los últimos 15 años, luego de sufrir un derrame cerebral en 2003. Pero su legado como uno de los arquitectos del sonido de West Side que fue la piedra angular del blues de Chicago en los años 50 y 60 está asegurado.
Como contemporáneo de otros cantantes de blues como Buddy Guy y Magic Sam, Rush esculpió un sonido distintivo. Su estilo se filtró en varias generaciones de guitarristas de rock, incluyendo a Eric Clapton, Stevie Ray Vaughan, Carlos Santana y Peter Green (Fleetwood Mac).
En una de sus últimas apariciones sobre un escenario tuvo lugar en el Chicago Blues Festival en 2016. Allí, Rush fue homenajeado por la ciudad de Chicago. Una banda de estrellas le rindió homenaje con una versión de su primer single, el clásico de 1956 «I Can’t Quit You Baby».
Rush había nacido cerca de Filadelfia, Mississippi, en 1934 y trabajó en una granja antes de mudarse a Chicago con su familia, cuando tenía 14 años. Después de que la madre de Rush lo llevó a ver un show de Muddy Waters, el zurdo autodidacta comenzó a tocar la guitarra, sin darse cuenta de que estaba sosteniendo una guitarra afinada convencionalmente boca abajo y hacia atrás. Casi al instante, consiguió un sonido único.
El adolescente Rush pronto podría ser escuchado tocando la guitarra desde la ventana de su departamento en el tercer piso en Wentworth Avenue, y comenzó a escuchar discos y pasar el rato en clubes a lo largo de la West Roosevelt Avenue. Sus eclécticos gustos musicales influyeron en su estilo: pronto comenzó a inyectar las melodías de jazz de Kenny Burrell y los acordes de órgano de Jimmy Smith en sus interpretaciones.
Rush pagaba el alquiler trabajando en una compañía metalúrgica y conduciendo un camión, entre otros trabajos, pero su música no podía ser negada. Su carácter distintivo fue capturado indeleblemente en «I Cann’t Quit You Baby», su primer single para Cobra Record Corp. en 1956.
Publicó algunas de sus mejores canciones en los próximos dos años con Cobra, incluyendo «My Love Will Never Die», «Groanin’ the Blues», «Three Times a Fool», «Double Trouble» y «All Your Love (I Miss Loving)». Si no hubiera hecho nada más que sus grabaciones para Cobra entre 1956 y 1958, eso hubiese sido suficiente para que sea venerado como un genio del blues.
Con sus bandas aportó una energía visceral a sus presentaciones en vivo, que hicieron de Rush un artista solicitado, incluso después de que Cobra se declarara en quiebra en 1958. Su banda de cinco integrantes de los primeros años 60, que incluía a Mighty Joe Young en la segunda guitarra, al saxofonista Abb Locke, al bajista James Green y al baterista Casey Jones, es ampliamente considerada como uno de los mejores grupos de blues de Chicago.
A medida que su reputación se expandió más allá de aquella ciudad, una generación de jóvenes guitarristas absorbió su influencia. Sus grabaciones de los 60 incluyeron una sesión con un joven prometedor llamado Duane Allman, cofundador de Allman Brothers, y la sección rítmica de Muscle Shoals. En los años 70, Delmark Records, con sede en Chicago, comenzó a documentar sus sesiones de estudio y Rush se convirtió en un pilar en los clubes del North Side.
A principios de la década del 80, Rush se alejó momentáneamente de los escenarios, pero pronto se encontraría nuevamente en actividad. Cuando Pearl Jam actuó en el estadio Soldier Field de Chicago en 1995, la banda de Seattle reclutó a Rush como su telonero.
En 2003, en una de sus últimas actuaciones antes del derrame cerebral, Rush tocó bajo una lluvia torrencial como cabeza de cartel del Chicago Blues Festival. El clima sombrío era de alguna manera apropiado para un artista cuya música estaba impregnada de presentimientos, la sensación de que el mundo se estaba cerrando sobre él. Cerró con una dolorosa versión de «Rainy Night in Georgia» de Brook Benton, saturando de blues cada sílaba mientras cantaba «Creo que está lloviendo en todo el mundo».