El 18 de mayo de 1980 se suicidaba en su casa de Manchester, Inglaterra, Ian Curtis, vocalista del grupo Joy Division.
Natural de Manchester, Warsaw era un cuarteto inmerso en la marea punk formada por Ian Curtis (voz), Bernard Albrecht (guitarra), Peter Hook (bajo) y Steve Morris (batería). Con el cambio de nombre a Joy Division comienza una insólita carrera: su primer álbum‚ («Unknown pleasures», de 1979) es un disco inhóspito, desolado, duro. Hace daño, musical y literariamente, y, a pesar de ello, crea adicción. También los conciertos se convierten en ceremonias límites, rituales. Se crea un culto.
De pronto, la hecatombe: el 18 de mayo de 1980, lan Curtis se suicida. A las pocas semanas se edita el recién grabado «Closer», con una premonitoria portada fúnebre, y un maxisingle con «Love Will Tear Us Apart», el tema más claro que hizo nunca Joy Division. Ambos discos ocupan los primeros puestos de las listas independientes. En octubre del mismo 1980 aparece «Still», álbum doble conteniendo demos y el último concierto de Curtis.
Luego, con Gilliam Gilbert (guitarra y teclados), Joy Division se convierte en New Order.