A fines de 2021 Javier Calamaro publicó «El regalo», un disco creado en medio de la pandemia, inspirado en el nacimiento de su hija y con colaboradores especiales tan dispares como Ulises Bueno, Roberto Musso (El Cuarteto de Nos) y Coco Sily.
Sobre la singular unión con el cantante cordobés, Calamaro recuerda: «Te diría que creo que el encuentro fue como para creer en el destino. Mira qué cosa rara pasó: era noviembre del 2019, ni nos imaginábamos lo que iba a pasar 4 o 5 meses después. Un día me llamo un amigo de Córdoba, un productor, Matías, que resultó ser amigo en común con Ulises y me dice ‘Ulises te quiere invitar al Luna Park, pero es medio tímido, entonces yo te estoy hablando por él’. ‘Un honor’, le digo. Entonces corta, me llama Ulises y me cuenta que al mes siguiente iba a hacer su luna Park número 9 o 10, no me acuerdo, ya había hecho unos cuantos, y que quería que yo aparezca de invitado cantando dos canciones, que eran como una especie de pequeño set de rock que Ulises mete en su show, por lo menos en este».
Javier cuenta como esa invitación terminó en una nueva versión de «Quitapenas». «Yo le digo ‘sí, Uli, encantado, gracias un honor, pero me gustaría que hagamos una versión de ‘Quitapenas’. ¿Por qué? Porque estaba terminando 2019 y unos meses más adelante, o sea a principio de 2020, se cumplían 20 años de la edición de ‘Quitapenas’ y yo tenía ganas de hacer una versión medio punk rock», indica. «Entonces le paso a Ulises el demo de esa versión, él se la pasa a su banda, llega el día del Luna Park y cuando voy a la prueba de sonido, creo que era el 9 de diciembre del 2019,y la tocan como cuarteto. Entonces dije ‘guau, la hicieron tropical’. Prueba de fuego: la cantamos esa noche, porque lo que yo en realidad quería era saber si la versión iba para adelante o no, o sea, tengo 5.000 personas que pagaron una entrada para ver a un señor que canta cuarteto. Si la aplauden quiere decir que es una buena idea. La hicimos así, medio cuarteto medio rockera… rara, y a la gente le encantó, como que estuvieron gritando y aplaudiendo de punta a punta».
«Al mes siguiente yo viajo a Córdoba, grabamos las voces, me vuelvo a Buenos Aires con las voces y chau, pandemia, quedamos todos encerrados en cuarentena. Entonces me dediqué a continuar con esa versión».
Esa reversión de «Quitapenas» llevó a Calamaro a revisar su catálogo y repasar otras viejas canciones. «Cuando yo me encierro, digamos, al comienzo de la pandemia, versionar y grabar virtualmente con otros músicos la de ‘Quitapenas’ también se me ocurrieron otras versiones para hacer. Algunas quedaron en el disco ‘El regalo’, otras no como el tema ‘Milagro’, un video que tal vez viste en el que salgo vestido de mujer pero ese salió por otro lado, salió mucho antes, pero ‘Quitapenas’ decidí guardarmela».
Al mismo tiempo, fueron surgiendo nuevas composiciones. «Mientras pasaba la pandemia y la gente se quería pegar un corchazo en las bolas porque estaba encerrada y no aguantaba más, yo me dediqué a hacer música, versioné algunos otros temas, compuse varios temas más, escribir unos temas muy lindos… el resultado de eso fueron cinco canciones de amor, inéditas, de amor de amor, porque celebré un acontecimiento que es más grande que el disco, que es que tuve una hija», confiesa.
Y agrega: «En plena pandemia, en una cuarentena malísima, yo estaba en la clínica acá en Martínez, cerca de casa, recibiendo una nueva vida, que por supuesto fue la mayor creación de esta pandemia, de esta cuarentena… la mayor creación que uno podría tener».
«Esto motivó las canciones nuevas. Hay una canción que se llama ‘El regalo’, que obviamente habla de la llegada de algo que buscamos con Paola durante 11 años… es una cosa con mucha emoción a flor de piel. Y en el medio de todo eso hay tres canciones más de amor, una canción de sexo y otras canciones que hablan de la vida y son canciones como muy maduras… como que siento la influencia de haber hecho ‘Quitapenas’ 20 años atrás y los discos de tango y tanto rock y tanta música influenciada un poco por todos los estilos que uno va incorporando. Eso es ‘El regalo'».
Además de Ulises Bueno, el disco cuenta con más colaboradores. «Hay tres invitados: uno es Roberto Musso y el otro es Coco Sily… Coco qué es un hermano. Lo de Roberto… yo había hecho una versión anterior de ‘El kiosco de la felicidad’ y esa primera versión que hice era una como una marcha camión, se llama… es el estilo del candombe. Y como marcha camión es un estilo uruguayo dije ‘Necesito un invitado uruguayo pero que rapee, no que cante’. Cuando estaba grabando aquella versión dejé el espacio para un rapeo», explica.
«Dicho sea de pasó lo único que quedó de aquella versión fue la voz de Roberto Musso, porque para el disco ‘El regalo’ yo grabé todo de vuelta porque dije ‘¿por qué hice un estilo uruguayo si a mí no me representa el candombe ni la marcha camión?’. Quiero hacer algo que sea más luminoso, el tema es muy luminoso y la marcha camión es medio trabada. Entonces le dejé la voz de Roberto, que rapea en dos momentos y es una canción con mucho desarrollo, con mucha luz y así fue como quedó».
«Uno normalmente hace videoclips. El primer videoclip que hicimos para este disco es el de Ulises Bueno y Javier Calamaro que ahora está ternado para los (premios) Carlos Gardel, la versión del vigésimo aniversario de ‘Quitapenas’. El segundo fue cuando me prestaron un circo. Me prestaron un circo con 20 acróbatas. Hicimos la versión del tema más fuerte de disco, ‘El kiosco de la felicidad’. Lo hicimos con el marco de un circo con 20 acróbata, simplemente porque me prestaron un circo, me hice amigo del Bicho Gómez y me prestó su circo».
«El tercer videoclip solo corresponde a cuestiones emotivas, o sea, no es el tema que podría sonar nunca por la radio, por decirlo de alguna manera. Es el tema que tiene un mayor compromiso y además es el último tema que compuse del disco, es el que le da título al disco. Acá se ve a mi bebé desde que nace hasta el día de hoy y es algo tan chiquito como intimista como gigante emocionalmente, por decirlo de alguna manera. Es una canción que no la pude cantar ni una sola vez sin llorar en algún momento. La versión del disco del tema ‘El regalo’ nunca la pude cantar sin llorar, de hecho lo que se escucha en el disco es un Javier completamente embargado por la emoción, pero de verdad, con lágrimas cayendo. Y esa es mi canción especial del disco, ‘El regalo'».