Klaus Meine, cantante de la banda alemana Scorpions, confesó que no esperaba que la canción «Wind of Change» se convirtiera en un éxito mundial como himno no oficial de la revolución pacífica que llevó hace treinta años a la caída del Muro de Berlín.
«Como autor, me sorprendió totalmente que (la canción) cobrara vida propia y que de repente fuera parte de la historia», dijo Meine a la agencia alemana DPA en vísperas de un concierto en Moscú.
El cantante de 71 años recalcó que «Wind of Change» casi se había convertido en la banda sonora de ese momento histórico. «Pero eso no se debió a ningún brillante plan de marketing. La gente sintió el poder y el mensaje de la canción directo en sus corazones», comentó.
Meine compuso la canción a mediados de 1989 durante una actuación en la antigua Unión Soviética, semanas antes de la caída del Muro de Berlín.
«Wind of Change» fue lanzada en noviembre de 1990 como parte del álbum «Crazy World» y se convirtió en el single más exitoso en todo el mundo del año 1991.
Tal fue el impacto de «Wind of Change» que incluso fueron invitados al Kremlin por el entonces presidente de la Unión Soviética, Mijail Gorbachov.
En una vieja entrevista, Meine explicó que la canción tiene un significado especial sobre todo en Europa del Este y en Alemania y que genera muchas emociones en Rusia, porque se la vincula con la caída del comunismo, mientras que en Alemania fue algo así como el himno de la reunificación.
Pese a ello, Scorpions nunca quiso ser una banda política. Meine siempre destacó que «Wind of Change» simplemente capturó un momento especial de la historia contemporánea, ya que es una canción que expresa la esperanza de que los seres humanos puedan vivir en paz.