Robert Plant dijo estar bastante disconforme con su voz en algunos de los primeros discos de Led Zeppelin.
En una entrevista con The Guardian, Plant recordó que «me di cuenta de que el enfoque duro y varonil para cantar con el que había comenzado en (la canción de 1966) ‘You Better Run’ no era de lo que se trataba. Canciones como ‘Babe I’m Gonna Leave You’ (de Led Zeppelin)… encuentro mis voces allí horribles ahora. ¡Debería haber cerrado la boca!».
Plant dijo que llegó a esa conclusión después de trabajar en la canción «Friends», un track unplugged y más experimental del principalmente acústico álbum «III», de Led Zeppelin.
En la entrevista, en la que Plant recuerda sus primeros días como artista hasta su más reciente álbum solista, «Carry Fire», que salió el mes pasado, el artista destacó algunas de las canciones que formaron su vida.
Además de «Friends», habló sobre «Achilles Last Stand» de Led Zeppelin, la dura canción de apertura de «Presence» (1976), que se lanzó justo cuando el punk irrumpía en el Reino Unido. Notó cómo The Damned era una de sus bandas favoritas a partir de ese momento. «‘New Rose’, ‘Neat Neat Neat’… qué canciones brillantes», dijo. «Con bastante razón patearon a los monstruos como Pink Floyd en un par de años».
Recordó cómo la música actual lo inspiró a llevar sus discos solistas a nuevos territorios. «No me estoy durmiendo en los laureles porque soy de otro tiempo», señaló. «Mi tiempo no puede ser lo último que hice. Tiene que ser lo que está a la vuelta de la esquina».
Desde entonces, Plant ha realizado algunos de sus mejores y más inquietos trabajos, incluida la colaboración de 2007 con la cantante de country Alison Krauss, «Raising Sand», que le valió un Grammy por Álbum del Año.
«Básicamente fui tutora de Alison», dijo. «Ella es una cantante muy precisa que ha hecho más dúos de los que puedes imaginar, y yo estaba pensando: ‘Socorro… soy un cantante de rock, no importa lo que haga’. Pero, por supuesto, no lo soy. Solo soy un tipo que canta canciones».