
Jorge Mario Bergoglio, conocido mundialmente como el Papa Francisco, fue ─y sigue siendo─ una figura que trasciende su rol religioso, mostrando una conexión profunda con la cultura popular de su Argentina natal. Si bien no hay evidencia directa de que Bergoglio haya sido un seguidor activo del rock argentino, su vida y sensibilidad social revelan puntos de contacto con los valores y el espíritu de este género musical, que marcó la historia cultural del país, especialmente durante las décadas de los 70 y 80. A continuación, exploramos esta relación a través de su cercanía con artistas y su compromiso con temas sociales resonantes en el rock nacional.
Un contexto compartido: la dictadura y la resistencia cultural
Bergoglio, nacido en 1936 en Buenos Aires, vivió los turbulentos años de la dictadura militar argentina (1976-1983) como provincial de los jesuitas. Durante este período, el rock argentino se convirtió en una forma de resistencia cultural, con artistas como Charly García, León Gieco y Miguel Cantilo usando sus letras para denunciar la opresión, la pobreza y la injusticia social. Aunque Bergoglio no estaba directamente vinculado al circuito musical, su trabajo pastoral en villas miseria y su apoyo a perseguidos por el régimen reflejan una sensibilidad similar a la de los rockeros que alzaban la voz contra la represión.
Por ejemplo, Bergoglio organizó una red clandestina para ayudar a opositores a huir del país, un acto de solidaridad que resuena con el espíritu contestatario del rock argentino de la época, como en canciones de León Gieco que abogaban por los derechos humanos. Su compromiso con los más vulnerables, descrito en su biografía oficial como una opción por «una Iglesia pobre y para los pobres», encuentra eco en las letras de rock que abordan la marginalidad y la lucha social.
Un encuentro con el “cura rockero” y José Ángel Trelles
Un vínculo más concreto entre Bergoglio y la música argentina se encuentra en su relación con el cantante José Ángel Trelles, conocido por su trabajo con Astor Piazzolla y su sensibilidad social. Según un artículo de Clarín, Trelles mantuvo diálogos con Bergoglio, entonces cardenal, que revelan una conexión basada en la preocupación por los más necesitados. Esta relación comenzó a través del padre César Scicchitano Tagle, un cura apodado «rockero» por su estilo influenciado por Los Beatles, los Rolling Stones y artistas argentinos como Pappo.
El padre César compuso música para un poema de Trelles, «Ángel de la calle», inspirado en los chicos en situación de calle, y se lo presentó a Bergoglio. Este encuentro dio lugar a conversaciones profundas sobre la necesidad de cuidar a los más vulnerables, un tema recurrente tanto en la prédica de Bergoglio como en el rock argentino comprometido. En una de estas charlas, Bergoglio aconsejó a Trelles y sus amigos evitar depender de donaciones empresariales para ayudar a un barrio, instándolos a “transpirar” por su cuenta para lograrlo, una muestra de su enfoque práctico y austero.
La influencia cultural de Buenos Aires
Bergoglio, criado en el barrio de Flores, estuvo inmerso en la vibrante cultura porteña, que incluía el tango, el fútbol y, en las décadas posteriores, el rock. Aunque su biografía destaca su amor por el tango y su fanatismo por San Lorenzo, su apertura a la literatura y las artes, como su invitación a Jorge Luis Borges para un taller en el Colegio del Salvador, sugiere una mente receptiva a las expresiones culturales de su tiempo. El rock argentino, con su mezcla de poesía, crítica social y conexión con la juventud, era parte del paisaje cultural que Bergoglio no podía ignorar como pastor cercano a la gente.
Una nota de humildad y cercanía
El Papa Francisco, como Bergoglio, siempre se caracterizó por su humildad y rechazo a los lujos, viviendo en un modesto apartamento en Buenos Aires y usando transporte público. Esta austeridad resuena con la actitud de muchos rockeros argentinos, que, lejos de la opulencia de las estrellas internacionales, hacían música desde las entrañas de la realidad social. Su capacidad para dialogar con artistas como Trelles y su apoyo a iniciativas culturales con un trasfondo social muestran que, aunque no fuera un fan declarado del rock, Bergoglio compartía su espíritu de lucha y empatía.
Vínculos con el rock internacional
- El disco «Wake Up!» (2015): Uno de los episodios más destacados que vinculan al Papa Francisco con el rock internacional es la publicación del álbum «Wake Up!», un proyecto musical que combina extractos de sus discursos en varios idiomas (español, italiano, inglés y portugués) con música contemporánea, incluyendo rock progresivo. Producido por el músico italiano Don Giulio Neroni y con aportes de Tony Pagliuca, exmiembro de la banda de rock progresivo italiana Le Orme, el álbum incluye canciones como «Wake Up! Go! Go! Forward!», que mezcla elementos de Pink Floyd, Bon Jovi y rock cristiano, según críticos musicales. El objetivo era acercar el mensaje del Papa a audiencias jóvenes mediante sonoridades modernas, rompiendo con la tradición de música sacra exclusiva de papas anteriores. El disco, lanzado por el sello Believe Digital, fue promocionado como un esfuerzo por dialogar con la cultura contemporánea, aunque recibió críticas mixtas, con una calificación de 2.5/5 por su eclecticismo.
- Invitación a Patti Smith (2014): En un gesto sorprendente, el Papa Francisco invitó a la icónica cantante estadounidense Patti Smith, conocida como la «madrina del punk», a participar en el concierto de Navidad del Vaticano en 2014. Smith, cuya música combina rock, poesía y espiritualidad, interpretó canciones en un evento que buscaba reflejar la universalidad de la Iglesia. La cantante expresó su admiración por Francisco, destacando su liderazgo y compromiso social, y afirmó que rezaría por él con su música. Este encuentro generó cierta controversia debido a la percepción histórica del rock como «rebelde», pero fue defendido como parte de la tradición del Vaticano de acoger artistas de diversos géneros.
- Encuentros con otros artistas internacionales: Francisco ha interactuado con figuras de la música internacional que abarcan el rock y otros géneros. Por ejemplo, posts en X mencionan que artistas como Bono de U2 y el cantante español Beret tuvieron la oportunidad de conocerlo o actuar en eventos relacionados con el Vaticano. Bono, conocido por su activismo y su música con U2, ha elogiado públicamente la labor del Papa en temas como la pobreza y la justicia social, valores que resuenan con el espíritu del rock comprometido. Aunque no hay evidencia de un vínculo musical directo, estas interacciones muestran la apertura que tuvo Francisco para dialogar con figuras de la música global.
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Relación con la música en general
- Música como herramienta de evangelización: Francisco ha enfatizado repetidamente el valor de la música como un lenguaje universal para la oración y la unión entre comunidades. En audiencias con coros internacionales, como el Encuentro Internacional de Coros (2018) o la Federación Pueri Cantores (2023), destacó que la música, incluidos los estilos contemporáneos, puede expresar la fe y conectar a las personas con Dios. En el Congreso Internacional de Música Sacra (2017), abogó por una música sacra «inculturada» en los lenguajes artísticos modernos, lo que incluye géneros como el pop y el rock cristiano.
- Apoyo al coro de la Capilla Sixtina: Bajo su pontificado, Francisco autorizó la grabación del álbum «Cantate Domino» (2015) por el Coro de la Capilla Sixtina, el primero de su tipo lanzado comercialmente con Deutsche Grammophon. Aunque centrado en música sacra renacentista, este proyecto refleja su interés en usar la música como un puente hacia los fieles durante el Jubileo de la Misericordia.
- El «cura rockero» y el rock argentino con proyección internacional: El padre César Scicchitano, amigo de Bergoglio desde los años 90, es un puente importante entre Francisco y el rock. Con su banda Los Pecadores, Scicchitano compuso el «Himno a Francisco», un tema de rock que grabó con la multinacional Sony Music en varios idiomas (portugués, italiano y francés). Bergoglio apoyó la carrera musical de Scicchitano, firmándole cartas de recomendación para discográficas y encargándole canciones sobre temas sociales, como la trata de personas. Este vínculo, aunque arraigado en el rock argentino, tuvo alcance internacional con la difusión del himno. Scicchitano afirmó que «Francisco tiene el rock adentro» por su actitud de romper estructuras, comparándolo con la filosofía del género.
- Música y juventud: Francisco ha promovido iniciativas como el Christmas Contest (2023), un certamen para jóvenes compositores, subrayando que la música, incluida la contemporánea, es una vía para expresar la búsqueda de Dios. Este enfoque conecta con el rock cristiano y otros géneros juveniles que han ganado popularidad en contextos evangélicos y católicos desde los años 60, como el Movimiento de Jesús en Estados Unidos.
