En un día que vibró con acordes de rock y toques de nostalgia, el legendario músico británico Rod Stewart fue declarado Huésped de Honor de la Ciudad Autónoma de Buenos Aires. La distinción, entregada en el Salón Eva Perón de la Legislatura porteña, no solo celebra una carrera de más de seis décadas, sino que sella un lazo eterno entre el cantante y un público argentino que lo recibe siempre con los brazos abiertos.
El acto, presidido por la vicejefa de Gobierno y presidenta de la Legislatura, Clara Muzzio, contó con la iniciativa del legislador Pablo Donati, quien impulsó la Declaración N° 171/2025. Donati, visiblemente emocionado, rememoró sus años juveniles: «De chico era rockero y un día fui a un boliche donde escuché ‘Da Ya Think I’m Sexy’. Me impactó tanto que me puse a investigar y descubrí que Rod no era solo disco, sino un gigante del rock».
Con esas palabras, el legislador leyó el texto oficial, declarando a Stewart –nacido en Londres en 1945, pero con raíces escocesas que lo hacen orgullosamente «tartán»– como un embajador cultural que ilumina las calles porteñas con su voz rasposa y su carisma inagotable.
A sus 80 años, Stewart irrumpió en la ceremonia con la energía de un veinteañero. Al ingresar al salón, ante unas 60 personas –en su mayoría políticos ávidos de selfies–, soltó un grito y tarareó un verso improvisado, desatando risas y aplausos. Detrás de él, tres banderas flameaban: la argentina, la de la Ciudad y la escocesa, un guiño a sus ancestros. Recibió el pergamino con una camiseta de la Selección Nacional con el número 10 a su nombre –un detalle futbolero que no pasó desapercibido–, y no dudó en agradecer con su acento cockney teñido de emoción: «Nunca recibí una distinción de este tipo. Es un gran honor. Buenos Aires es una ciudad muy emotiva, y sus fans son abrumadores y fantásticos. Me siento como en casa». Para rematar, agregó un toque picante: «Es un placer estar en el país que le dio al mundo a Messi y Maradona».
ROD STEWART 🇦🇷✨
— Move Concerts Arg (@moveconcertsarg) October 24, 2025
AHORA ES HUÉSPED DE HONOR DE LA CIUDAD DE BUENOS AIRES 💫 pic.twitter.com/i3YS0jUYnq
Este reconocimiento llega en el cierre de su gira de despedida «One Last Time», que incluyó tres shows agotados en el Movistar Arena. Este viernes por la noche, Stewart despidió Buenos Aires con un set de hora y 45 minutos que repasó himnos como «Maggie May», «Forever Young», «Young Turks» y «Rhythm of My Heart», culminando en un carnaval carioca con «Love Train» de los O’Jays y globos explotando como pirotecnia improvisada. «De todas las ciudades que he recorrido en mi vida, nunca he tenido uno de estos», confesó el músico, visiblemente conmovido por el cariño de un público que lo ha ovacionado en visitas pasadas, desde los ’80 hasta hoy.
La Legislatura porteña, al otorgar esta distinción, resalta no solo el legado de Stewart –quien ha vendido más de 250 millones de discos y se reinventó desde el folk y el blues hasta el pop de los 70 y el soul contemporáneo–, sino su conexión con Argentina. Buenos Aires, «faro cultural de Latinoamérica», como la describió Donati, respira música, tango y fútbol, y ahora agrega un capítulo más con el eco de «The First Cut Is the Deepest». Para los porteños, Rod no es solo un ídolo: es ese amigo escocés que siempre vuelve para cantar «una última vez».
En palabras de Muzzio, quien entregó el galardón junto a Donati: «Esta distinción es de todos los ciudadanos de Buenos Aires, que no solo respira tango y fútbol, sino también la música de Sir Rod Stewart». Y así, entre risas, flashes y promesas de regreso, el rockero se despidió de la Casa Parlamentaria, dejando un rastro de rasgueos imaginarios en el aire porteño. ¿Quién sabe? Tal vez en su próxima visita, ya no sea huésped, sino vecino de honor.