A fines de 2021, Babasónicos retomó los conciertos en vivo tras la pandemia y este año lanzó «Trinchera», su 13º trabajo de estudio. Fue ampliamente aplaudido por la prensa especializada y tiene ahora edición en formato CD con diseño de arte a cargo de Alejandro Ros.
Mientras tanto, Babasónicos sigue arrasando con el Bye Bye Tour que ya pasó con gran éxito por España (sold out en Madrid y Barcelona), Uruguay, México (sold out en CDMX y Tuxtla) para continuar en junio por la Argentina, con entradas agotadas desde hace un mes para los dos conciertos previstos 24 y 25 de junio en el estadio Movistar Arena de Buenos Aires.
La gira se extenderá hasta el mes de noviembre y su recorrido contempla Chile, los Estados Unidos, Europa, Colombia y Paraguay. Entre esas fechas se encuentra su actuación como cabeza de cartel del Ruido Fest en Chicago.
Adrián Dárgelos explica por qué la banda no hizo ninguna presentación vía streaming durante la cuarentena. «Nosotros durante la pandemia nos silenciamos, nos llamamos a silencio y no hicimos streaming ni nada. No nos parecía que había que salir en alguna clase de desesperación a pedirle a la gente que sepa que existís, si la música perdura, no necesita tu cara para que perdure», cuenta.
«Cuando en 2021 hacemos este disco, ya terminados los compromisos del disco, vemos posible una ventana de empezar a salir a hacer shows. El primer show que salimos es en Ciudad Juárez. Ciudad Juárez es en la frontera con El Paso, Texas. No era la primera vez que tocábamos en Ciudad Juárez, habíamos tocado ya diez veces, era una ciudad hípervacunada, con un 92% de la gente vacunada porque al estar en la frontera tenían la posibilidad de ir al otro lado y hacer todo. Son ciudades muy grandes y de mucho tránsito, de gente que va y viene, y estrenarte en un show lleno en la frontera más lejana donde tu lenguaje llega, en un lugar que pensás que es imposible, Y así empezó».
Dárgelos también echa luz sobre la popularidad de la banda en toda América Latina, cosechando algo que comenzó a sembrarse en los años 90. «Nuestros discos salen desde 1994 en todos los países de Latinoamérica y Estados Unidos, creo que recién a partir de ‘Jessico’ salen en España», recuerda. «Era ya raro que los discos salgan en otros países porque no los podían impulsar. Desde Argentina no se puede impulsar a nadie, no podés presionar a ningún país a que te saque el disco. Cada disco tenía su edición de cada país, es decir, abajo decía de qué país provenía la edición de cada CD, y eso no era muy normal. Ahora nos parece normal porque se edita en todos lados en streaming, pero en la década del 90 no era normal, entonces Babasónicos tuvo esa particularidad».
Y agrega: «También estaba MTV que era una cadena panregional y que nos habían elegido como la imagen del canal, una cuestión así. Grabamos un disco en Los Ángeles ya en el 95, y ahí hacemos como seis o siete shows y nos vamos 35 días a México, creo que hacemos 33 shows en 35 días… llegué a tocar tres veces en el mismo día. Pero justo caemos en el ‘efecto Tequila’, y era imposible juntar la plata ni para volver. Pero lo disfrutamos mucho y a partir de ahí se inició todo un derrotero por América y Estados Unidos que hasta el día de hoy es parte de nuestra escena».
Un dato curioso en la cerra de Babasónicos es la falta de invitados en sus discos, una cuestión que Dárgelos tilda de «muy particular», especialmente «ahora que se pusieron tan de moda los featuring«. «En el primer disco solo tuvimos dos invitados, que eran (Gustavo) Cerati y (Daniel) Melero, después nunca más… Melero canta y Gustavo toca la guitarra. A veces, las canciones están construidas para diferentes colores de voces sorprendan, estén desde un acting que no parezca siempre el mío, salir del propio personaje o del personaje que está construida y emite las canciones de forma más habitual y darle otras clases de voces que sorprendan»,
«Sería fantástico amanecer y ser nuevo. Yo pensaba ser un escritor nuevo, en contra de lo que te es habitual, y cantar también desde esa manera, pero es muy difícil… entonces actúo, finjo otras voces, En el caso de ‘Bye Bye’ los coros soy yo, no me dejan traer coros femeninos. Los coritos los tengo que hacer yo de alguna manera, inventarme voces».
Foto: Chiara Girimonti (@chica.chiara)