1998 fue un año de cambios para el hip-hop. El ambiente recién se estaba recuperando de los asesinatos de Tupac Shakur y Notorious B.I.G.. Grupos como The Fugees y A Tribe Called Quest se separaban para que sus integrantes emprendieran sus carreras en solitario. Mientras tanto, surgía el dúo Black Star. No Limit Records de Master P colocaba a artistas como Silkk The Shocker y Mystikal en la cima de los charts. El sello Death Row estaba en su descenso final, mientras Bad Boy levantaba vuelo con Roc-A-Fella y Ruff Ryders detrás. DMX, JAY-Z y Method Man fueron los MC de Nueva York que llevaron su sonido al número uno, escribiendo un nuevo capítulo en la historia del lugar que dio nacimiento al género.
Sin embargo, tal vez uno de los lanzamientos más memorables de ese período provino de una banda que llevaba ya 15 años de carrera, «Hello Nasty» de los Beastie Boys. Ese álbum, lanzado hace 20 años, le dio al hip-hop algo familiar y fundamental para aferrarse a un momento en el que las cosas en el mundillo del rap parecían estar cambiando a un ritmo drástico.
El trío nacido en la ciudad de Nueva York era conocido por su energía, diversas inspiraciones y una estética de punk rock. Desde su álbum debut de 1986, «Licensed To Ill», hasta su apogeo en MTV durante los 90, los Beastie Boys siempre se animaron a dar saltos al vacío. En su cuarto álbum de estudio «Hello Nasty», lanzado el 14 de julio de 1998, estaban listos para empujar los límites de una comunidad musical segmentada por el mercado.
En su primera semana en el mercado, «Hello Nasty» consiguió superar las ventas de cualquier álbum de rap ese año. Los Beastie Boys llevaron con este disco un mensaje diferente al propuesto por sus colegas. El título del álbum fue inspirado por la recepcionista de la empresa neoyorquina de publicidad Nasty Little Man, quien contestaba el teléfono con el saludo «Hello Nasty».
Como los autoproclamados «Científicos del Sonido», los Beasties continuaron en el mismo punto en el que habían quedado después de un paréntesis de cuatro años, iniciado tras el lanzamiento de su álbum triple platino «Ill Communication». El nuevo LP encabezó los ránkings gracias a la solidez del primer single, «Intergalactic».
Además, el grupo sumó a Mix Master Mike, integrante de Invisibl Skratch Piklz. Mike reemplazó a DJ Hurricane, quien se embarcó en una carrera en solitario. En la gira de presentación del LP, el escenario redondeado se asemejaba a una bandeja, apuntando claramente a sus raíces de hip-hop. El álbum también marca la incorporación de Eric Bobo como percusionista. Además, antes de que A Tribe Called Quest se separara en septiembre, los Beastie Boys los tuvieron como teloneros en su gira por los Estados Unidos.
El álbum abre con «Super Disco Breakin'», fusionando nuevamente su característico sello de rap-rock, con cortes frenéticos de Mike y el homenaje a la vieja escuela del hip-hop. «Song for Junior» dispone de Miho Hatori en la voz y «Dr. Lee, PhD» cuenta con la estrella del dub Lee Scratch Perry en voz y percusión.
Canciones como «The Move», «Body Movin», «Remote Control», «Three MC’s and One DJ», «The Negotiation Limerick File» le permitieron sentir a los Beasties y a su productor, Mario Caldato Jr., que estaban en el buen camino.
«Hello Nasty» también cuenta con elementos de dub y reggae, junto con pinceladas de polka y bossa nova jazz. trip-hop y hasta indie rock lo-fi. Todo eso es parte de la rica mezcla que puede encontrarse en el álbum. Mike D, Ad-Rock y el fallecido MCA desarrollaron rutinas y cadencias simplistas de rima, realzadas por letras humorísticas o irónicas. Junto con los samples que lo abarcan todo, el material refleja las primeras influencias del grupo, como Run-D.M.C. y el eclecticismo de las leyendas pop-punk The Clash.
«Hello Nasty» ganó dos premios Grammy en 1999: Mejor Álbum de Música Alternativa y Mejor Interpretación de Rap por un Dúo o Grupo por «Intergalactic». Además, consolidó a los Beastie Boys entre los artistas más influyentes en la década por venir. Limp Bizkit, Rage Against The Machine, Linkin Park, Sublime, OutKast y Eminem aprendieron de memoria todas las páginas del libro de enseñanzas de los Beastie Boys.