Don Osvaldo ha compartido el single «Feliz y seguro», el último adelanto del álbum «Flor de ceibo», que será publicado el próximo viernes 18 de noviembre en todas las plataformas digitales y en formato vinilo.
Este tercer disco de estudio de Don Osvaldo será presentado en vivo por la banda liderada por el vocalista Patricio Santos Fontanet los días sábado 26 y 27 de este mes, con dos conciertos en el playón de estacionamiento del Estadio Centenario de Quilmes.
Además del Pato, la banda está conformada por el bajista Christian Eleazar Torrejón, los guitarristas Álvaro Puentes y Gastón Videla, el baterista Luis Lamas, el percusionista Juan «Juano» Falcone, el saxofonista Leopoldo Janín y el pianista y tecladista Gabriel Gerez, además del músico cordobés Gianni Pesci como invitado con el bandoneón.
Don Osvaldo ya ha estrenado en vivo varias canciones del álbum, como «Bienvenidos» -el tema que abre el disco-, «Normal», «Estampita», «Lejos de la largada» y «Un demonio».
«Flores por piedad», «Políticamente correctos», «Caer», «Hijos» y «Necesidades» con los temas que completan el álbum.
«Feliz y seguro» tiene letra de Gabriel Geréz, Juan Falcone, Leopoldo Janin, Luis Lamas y Rogelio Santos y música de Christian Torrejón y Rogelio Santos. La canción cuenta con un video lyric realizado por Voncoptel y Danila Cannata.
«Feliz y seguro» (letra)
Cómodo, calentito y en babia estoy bien, soy muy feliz.
¡Cuánto placer hay en la placenta sin conciencia!
Solo puedo sentir que estoy seguro
y cuando salga así quiero vivir.
Con indiferencia, egoísmo y kilos de estupidez.
Busco la ausencia de tristeza, la que creo que sentí antes de nacer.
Amo los cuentos de hadas y nada va a empañar a esta nada total,
ni que nadie me afane la sonrisa ni el lugar que tengo en la sociedad.
Estoy tan seguro, estoy tan feliz.
No me depriman, si pienso en el otro me olvido de mí.
No me preocupo ni me aburro, a la fiesta la puedo pagar.
Y voy comprando lo que sea para hacer que se muera la soledad.
Mientras festejo, el otro barre y me sirve y para mí es natural.
Tan natural como creer que la miseria no me puede tocar.