Fito Páez publicó en noviembre de 2017 su 24º álbum de estudio, titulado «La ciudad liberada». El nombre está inspirado en la Buenos Aires de la primavera democrática, donde «las cosas podían suceder y nadie se asustaba de nada, no existía el bienpensantismo -entre nosotros, por lo menos- y se vivía todo con muchísima alegría», según comentó el rosarino.
«La ciudad liberada’ es una mirada utópica, por un lado, y por otro lado también sin ninguna nostalgia, pero sí recordar la ciudad hermosa que era Buenos Aires cuando llega la democracia ¿no?», explicó. «Desde el año 1983 hasta 1989 fueron años de muchísima libertad, muchísimo caos -entre los jóvenes, por lo menos-, había cierta anarquía».
Fito amplió con detalles su posición: «Ver a Batato Barea -que era un actor maravilloso- vestido de mujer besando a un policía en la puerta de un boliche que se llamaba Bolivia, un boliche hermoso donde iba toda la beautiful people pobre de Buenos Aires, todos diseñadores, actores, músicos… era un poquito como la Factory de (Andy) Warhol de Nueva York pero en Buenos Aires. Ver a Batato besando a un policía era una escena de ciudad liberada. Es una situación muy hermosa tener ese recuerdo donde las cosas podían suceder y nadie se asustaba de nada, no existía el bienpensantismo -entre nosotros, por lo menos- y se vivía todo con muchísima alegría. Esa es la verdad».
«La estética es una ética, y buscar la construcción de un álbum, un libro, un film o lo que sea, lleva mucho tiempo en silencio», comentó sobre la gestación de «La ciudad liberada». «Lleva mucha tarea en solitario. Después ingresa la zona de la grabación, los músicos, los arregladores, los técnicos, la edición… pero en principio es una tarea titánica. Esa es una labor política. Ir sobre el detalle de cada momento, relacionar las tímbricas con las rítmicas, cómo vas a hacer la modulación en tal momento para que eso esté ligado a la vez con el comienzo del álbum, y una repetición al final… toda esa tarea de construcción de composición es una tarea de dedicación. Eso también es político, no lo hago así nomás. No hago un tema atrás de otro, no invento noticias para estar en la cámara. Me dedico a una cosa sagrada que es la música y lo hago con mucho amor y gracias a la voluntad de mucha gente que ha decidido darme ese privilegio».
Sobre «Aleluya al sol», el primer single del álbum, Páez explicó cómo surgió el título y la relación con el colectivo #NiUnaMenos, mencionado en la letra. «El aleluya es una palabra del jubileo judío y es una palabra de celebración», destacó. «En el medio de la canción, cuando estaba haciéndola, me parecía que era hermosa también esa palabra para apoyar al movimiento de #NiUnaMenos, como cantarlo con alegría. Y también decir algunas frases como ‘crimen no es pasión’, que ayudan a poner un cierto orden o para aclarar ciertas ideas ¿no?».
«72 minutos es una hora y diez. Ché, déjense de joder… están lobotomizados», se quejó sobre los más jóvenes que no suelen escuchar álbumes completos. «Yo cuando era chiquito estaba cuatro horas escuchando música. Muchachos, hay que apagar el teléfono… muchaches (risas)… poner ahí la música, tomarse un trago y disfrutar. Cortar la imagen, ¿viste? la imagen ha hecho mucho daño también en todos estos últimos años. Porque la imagen te emboba y la música te transporta, va a tu imaginación. Es hermoso. Hay que volver a esa experiencia», sentenció.
«La ciudad liberada» fue grabado durante 2017 entre Miami, Buenos Aires y Rosario, y mezclado por Mariano López y Franco Mascotti. También contó con varios invitados como Fabiana Cantilo, Fabián Gallardo, Antonio Carmona, Antonio Montoya y Deborah Dixon, entre otros.
Fito Páez presentará «La ciudad liberada» en Rosario, su ciudad natal, este 30 de junio desde las 21 en el Salón Metropolitano (Junín 501).