En esta entrevista en 2010, Pity Álvarez reflexiona sobre la discriminación, una soeidad que respeta las leyes y las prohibiciones. También habla de una vez que cayó detenido y firmó los papeles de la policía como «Viejas Locas».
«Hay que ayudar a la gente. ¿Qué se yo?… la gente ve un borracho y dice ‘¡qué borracho!’, ve uno que está re dado vuelta y dice ‘¡qué falopero!’. Esa es la gente que más ayuda necesita. Y yo creo que la gente que discrimina necesita mucha ayuda, para que el mundo cambie de a poco», cuenta.
En la entrevista, Pity se siente alienado. «Me siento como en otra era, me siento como cien años atrás», confiesa. «Mi mente tiene ganas de ir para adelante pero a veces no te dejan. Yo tampoco me voy a dejar arrastrar por la corriente. La gente no me responde, (entonces) no voy a responderle más a nadie. ¡No, está bien! Si uno me robó no quiere decir que todos estos negros son todos chorros… ¡es uno!… los otros no».
«Simplemente tendría que ser diferente», ansía. «Me encanta cuando veo un partido de Inglaterra y no hay para avalanchas, y no hay rejas… me gusta eso, gente con la mente abierta. Que no haga lío pero no porque no lo pueda hacer, sino porque no lo debe hacer».
Sobre la prohibición que rige sobre las drogas, apunta a otras sustancias que también son dañinas y que, sin embargo, son aceptadas. «Prohibirte que fumes marihuana abriendo (la posibilidad de consumir) alcohol, tabaco, sal, azúcar… ¿cuánta gente muere de diabetes, hipertensión, cirrosis o cáncer?. Hagamos una estadística, veamos los números y veamos qué es más peligroso de todas esas cosas ¿no?».