Metallica se burló del infame sonido de la batería de Lars Ulrich en el álbum «St. Anger». Lo hizo en un posteo que muestra que algunas canciones de «St. Anger» han llegado a la aplicación de instrucción de guitarra Fender Play.
Más de 20 años después del hecho, la autoconciencia de Metallica es a la vez divertida y afirmativa.
El sonido de batería único de «St. Anger» sigue siendo un punto de discordia entre los fans de Metallica y a menudo se cita como una de las características distintivas del álbum, lo que contribuye a la recepción polarizada del disco en su conjunto. El controvertido sonido de batería, que se centra en un tono de caja poco ortodoxo de Ulrich, también se caracteriza por la falta de platillos tradicionales y una sensación cruda y sin pulir.
El miércoles, con un gesto de complicidad que se puede sentir a través de la pantalla, Metallica llamó a «St. Anger» «el álbum favorito de todos» en una publicación en las redes sociales que apuntaba a los fanáticos de Fender Play.
La banda agregó en la publicación: «Desempolvá tu guitarra (lo siento, la caja tendrá que esperar otro día) y empezá con ‘Frantic’, ‘St. Anger’, ‘Some Kind of Monster’ y ‘The Unnamed Feeling'».
El sonido de la batería de Ulrich en «St. Anger» sigue siendo un tema de debate frecuente, incluso dos décadas después. Pero el baterista respalda plenamente el tono de batería que ha recibido tantas críticas a lo largo de los años.
Durante la grabación del álbum de 2003, Ulrich tocó principalmente su batería sin las «trampas», esos cables rígidos que se sostienen debajo del instrumento y que le dan su distintivo «pop». En cambio, «St. Anger» emite un «timbre» revelador que muchos músicos equipararían con un baterista que se olvida de girar la palanca que activa las trampas.
En realidad, el sonido de batería de «St. Anger» pudo haber comenzado de esa manera, pero el movimiento finalmente se materializó como una decisión consciente de Ulrich. Además, el baterista de Metallica todavía lo apoya incondicionalmente, como dijo en una entrevista.
«Lo banco al 100% porque, en ese momento, esa era lo correcto», respondió Ulrich cuando se le preguntó sobre el sonido de la batería. «Por mi personalidad, siempre estoy mirando hacia el futuro, siempre pensando en lo siguiente».
Foto: Anton Corbijn