Hoy cumple 50 años «My Generation», el inmortal himno de sublevación de The Who. Un tema enorme en su momento, que siguió creciendo aún más durante las siguientes cinco décadas.
En 1965, el guitarrista Pete Townshend no era mucho más que un adolescente airado y desafiante que escuchaba melodías incesantemente dentro de su cabeza. Tenía un grupo, The Who, en el que compartía sus sueños y aspiraciones con Roger Daltrey (voz), Keith Moon (bateria) y John Entwistle (bajo).
Gracias a su ímpetu creativo, todos juntos consiguieron algo de popularidad entre los jóvenes mods británicos, que rápidamente los convirtieron en estandarte de su revolución. Y no solo por sus primeras composiciones, sino también por esa costumbre de Townshend de destruir su guitarra sobre el escenario (algo que comenzó por accidente en septiembre de 1964 en un recital en Londres, y que después tuvo que continuar casi por obligación como parte de la esencia del grupo).
Poco después lanzaron su primer single, «I Can’t Explain», en enero de 1965, que se coló en el Top 10 británico. Con la fama de The Who creciendo sin control, el 29 de octubre de 1965 llegaba «My Generation» como anticipo de su LP debut, titulado muy elocuentemente «The Who Sings My Generation», y editado poco después, el 3 de diciembre de aquel año.
«My Generation», el himno, compuesto por un Pete Townshend que entonces tenía 20 años, fue recibido con alegría por los jóvenes ingleses de la época, que comprendieron rápidamente el mensaje: los mayores no nos comprenden.
Tras su lanzamiento como single, «My Generation» se ubicó en el segundo puesto en el chart del Reino Unido. En los Estados Unidos la cosa no fue tan fácil, y se quedó en el puesto 74, constatando las diferencias de una juventud por aquel entonces en absoluto globalizada.
Como todo clásico requiere explicación y análisis. El propio Townshend explicó que lo compuso durante un viaje en tren, inspirándose en la Reina Isabel, quien obligó a tener un coche fúnebre retenido en el barrio londinense de Belgravia para no verlo durante su paseo diario. Por otro lado, Townshend, muchacho furioso pero también agradecido, acreditó el «Young Man Blues» de Mose Allison como la inspiración musical del tema.
«My Generation» se convirtió en un lugar seguro para toda una generación de adolescentes que no encontraban su lugar en el mundo. Al mismo tiempo, el rock estaba todavía en pañales y nadie sabía cuánto y cómo de peligroso iba a ser. La alineación de los astros convirtió a The Who en la bandera de la insurrección.