Los miembros del dúo Tears For Fears están «muy orgullosos» de su nuevo álbum «Tipping Point». Roland Orzabal y Curt Smith, ambos de 60 años, creen que su nuevo lanzamiento, publicado hoy, es «un disco de ahora».
Después de 17 años desde la salida de su último álbum, Smith le dijo al periódico The Sun: «‘The Tipping Point’ es un álbum de ahora. Hay algunas canciones muy contemplativas, algunos temas más tristes, pero aún así te deja con una sensación de optimismo».
«Es el último álbum de Tears For Fears y ambos estamos muy, muy orgullosos de él».
Orzabal admitió que la «tarea era hacer un álbum representativo de nosotros, a los 60».
Y agregó: «¿Cómo podemos traer nuestra experiencia de vida buena y mala a la mesa y hacer algo que le hable a la gente? Nuestro mejor trabajo, y el trabajo que ha perdurado a lo largo de los años, es lo que resuena en la gente».
Orzabal se vio impulsado a comenzar a trabajar en el álbum, y reunirse con Smith en 2017, luego de la muerte de su primera esposa, Caroline, quien falleció después de lidiar con la demencia inducida por el abuso del alcohol durante cinco años, después de 35 años de matrimonio.
Orzabal expresó: «Hay tantas áreas de la salud mental que simplemente no entendemos».
«Si alguien cambia repentinamente de personalidad, si de repente pasa de ser extrovertido a retraído, es difícil de entender. Caroline perdió a sus padres cuando eran jóvenes y creo que nunca lo procesó por completo».
Los creadores de éxitos como «Everybody Wants to Run The World» y «Shout» compararon su dinámica con la de «un matrimonio», y Smith comentó que era «difícil» verlo llorar, lo que provocó que el trabajo en el álbum se detuviera en 2018.
Smith, quien está casado con Frances Pennington, la madre de sus dos hijas -Diva, de 13, y Wilder, de 10-, dijo: «Es difícil ver a alguien con quien has crecido pasar por ese dolor, pero lo único que pude hacer fue alejarme de eso. No nos ayudaba estar juntos».
«Roland y yo somos como un matrimonio y, como cualquier matrimonio, tendemos a culparnos mutuamente cuando las cosas van mal. Llegamos a un punto en 2019 en el que realmente no nos hablábamos».
Sin embargo, ese mismo año, sin la ayuda de un mánager ni de ningún otro tercero, ambos se reunieron para volver al trabajo.
Después de casarse con su segunda esposa, la fotógrafa Emily Rath, Orzabal dijo: «Me tomó la mayor parte de ese año recuperarme».
Y agregó: «Tenía muchas ganas de seguir adelante. Comenzamos a trabajar en unas cinco canciones y necesitaba volver a conectarme con Curt. No fue muy difícil en absoluto».
«Cuando decimos que nos peleamos, solo significa que no nos estamos comunicando, así que cuando lo hacemos, es fácil», sentenció.
Foto: Frank W. Ockenfels