La banda Bigger, que acaba de lanzar «En conexión» y una versión por streaming de «Cultura Live», se ratifica en la escena del rock alternativo pero también «como una banda muy abierta, sin tabiques», según la definió su cantante y guitarrista, Luciano «El Negro» Villacé.
Con 15 años de trayectoria y cuatro discos editados, Bigger es una de las bandas fuertes de la escena de rock alternativo y en su último disco, «Del otro lado» (2019), profundizaron esa búsqueda sumando sonidos más modernos, cuerdas y máquinas.
Al cuarteto que se completa con Emanuel Martinez en batería, Oliver Knox en guitarra y coros y Pablo «Poli» Inda en bajo, “le vino bien un poquito de vacaciones tras un año y medio bastante al palo. Pero estamos empezando a laburar cosas y creo que cuando se abra todo esto antes de fin de año vamos a grabar algo seguro”, comentó Villacé en declaraciones a la agencia Télam.
“Por más que el disco sea joven hay muchas ganas de hacer algo nuevo. Este momento nos da esa posibilidad así que hay que hacer música”, postuló el músico.
«Estuve haciendo, por ejemplo, algo más tirando a urbano, no trap específicamente pero sí más moderno», agregó, destacando que se está probando como compositor más allá de Bigger. «Mucho con bata electrónica, secuenciado y sinte, mucho eso. Saqué temas del cajón, un montón en la computadora, y también me salieron. La composición es como un músculo, cuanto más metido, más te salen. Y tenía ahí temas de hace años que no son para Bigger».
Esa búsqueda de nuevos caminos lo está llevando a probar canciones compuestas para chicas, para voces femeninas. «Estuve probando grabar, producir y componer para otro artista y no quiero decir mucho todavía (risas)», dijo. «Estoy probando canciones para Luciana Segovia que quiere salir del palo y palo del rock alternativo y ponerle riff y groove. Creo que está en la etapa de búsqueda. Me parece que ella quiere ir un poco con una cosa bien moderna pero manteniendo el rock… quiere mantener el rock».
En relación a la producción de música urbana, Villacé manifestó que «hay cosas que están buenísimas de ese palo». «Los pibes nacieron con la compu instalada y ahora ya tienen todo, pueden bajarse programas, plug-ins, un montón de cosas gratis para hacer música. Son cosas que capaz antes eran más difíciles de conseguir y ahora están al alcance. Y el rock como género también se va adaptando».
Y agregó: «No hay límite en la parte creativa, podés hacer lo que se te cante. En este contexto, por ejemplo, al no tener una batería o un bajo eléctrico a mano hay que ver cómo resolverlo con otra cosa. Inclusive hay canciones donde no meto una guitarra, no quiero escuchar una guitarra. Es un desafío y estoy contento con cómo se viene desarrollando».