Vicentico publicó hoy su séptimo disco solista, «El pozo brillante», al que define como «un pozo en el que hay de todo y yo le encuentro un montón de lucecitas». El álbum contó con la producción del experimentado venezolano Héctor Castillo (Gustavo Cerati, No Te Va Gustar, Los Fabulosos Cadillacs).
«Lo tengo listo desde antes de la pandemia. El 80% lo grabe en Nueva York y el 20% acá. Héctor Castillo coprodujo el disco conmigo, yo soy muy desordenado y Héctor es más desordenado que yo, por eso tardamos dos años en hacerlo», contó el músico en declaraciones a la emisora porteña Mega 98.3.
Y agregó: «La pasamos muy bien pero fue largo, fueron dos años buscando cosas y divirtiéndonos con la música. Afuera quedaron muchas canciones, como otro disco entero grabado y mezclado. Iba a ser ese el disco pero no nos gustó. Más adelante vamos a ver si lo usamos».
Sobre el espíritu de «El pozo brillante», Vicentico contó: “El disco tiene dos caminos diferentes, uno es con orquesta y banda grande, con muchos vientos y muchas cosas y la otra parte es como más dura y más metida para adentro».
En otra entrevista con el diario La Nación explicó de dónde surgió la idea del título: «Siempre sentí que los discos están limitados por uno mismo. Las ideas de uno mismo, los formatos. En las canciones hay un límite y ese límite es como si fuera un pozo que tiene profundidad. Para abajo no hay ningún tipo de límite, pero sí para los costados. Y es un pozo que brilla y brilla, en el que hay de todo. Yo le encuentro un montón de lucecitas. Tiene más que ver con viajes psicodélicos. No digo que los haya experimentado pero me interesa el tema de ir para adentro. Ahí hay un mundo inabarcable y el título del disco tiene que ver con eso».
El álbum incluye un par de canciones que se conocieron en los últimos meses: «Freak» -que abre el disco- y “No tengo” -su versión del clásico de Nina Simone «Ain’t Got No, I Got Life»-. El cierre corresponde a «El plan», una canción que quedó afuera de la película que dirigieron su esposa, Valeria Bertuccelli, y Fabiana Tiscornia,
Además, confesó sus ganas de volver a tocar en un vivo: «Me encantaría poder tocar este disco. Todos los músicos con los que me rodeo lo extrañamos mucho. Es como que se fue algo que hacíamos todo el tiempo y ahora no está. Tocar para un cantante es un modo de expresión».
Sin embargo, y a pesar de todo, hay un escenario que lo espera. En agosto tocará en Chicago con Los Fabulosos Cadillacs en el festival latino Ruido Fest y que ya los tuvo hace varios años como cabezas de cartel.