El músico Fabián «Zorrito» Von Quintiero, reconocido simpatizante de Boca Juniors, le entregó hoy miércoles al Papa el último disco de Charly García, «Random», y bromeó con el hincha de San Lorenzo más famoso por la victoria del «Ciclón» frente a Banfield, que le permitió ser campeón al club de la ribera.
«Gracias por haberle ganado ayer a Banfield y antes a River, pudimos salir campeones», le dijo el ex Ratones Paranoicos a Jorge Bergoglio, en referencia a las victorias del club azulgrana que le permitieron al Xeneize coronarse ayer campeón de fútbol argentino, incluso antes de jugar.
En su cuenta de Instagram, el «Zorrito» escribió: «¡Mision cumplida! Después de algunas horas bajo el sol de una Roma muy caliente pude encontrarme con Su Santidad. Le dejé discos de regalo de nuestro rock y el texto de puño y letra de Charly para el. Lo hice reír con algo que le dije y mandó bendiciones para todos. Fue muy amable, cordial y cariñoso para conmigo, mi hijo, mi hermano y mi primo. Este encuentro fue posible por un amigo del colegio que lo conoce mucho. Le agradezco a él su afecto por nosotros desde que somos chicos.Y al Sumo por permitirnos sentir su aura. ¡Verdaderas gracias Señor!».
Luego, en diálogo con la agencia Télam en el Vaticano, Quintiero reconstruyó el momento de su encuentro con el Pontífice. «Yo fui compañero de la escuela primaria con Guillermo Karcher, ahora oficial de Protocolo de la secretaría de Estado del Vaticano. Mi primo Ovi también iba al mismo grado, y ahora tras muchas invitaciones pudimos finalmente venir a reencontrarnos y conocer al Papa», describió el «Zorrito», ya sin el saco con corbata repleta de instrumentos musicales con el que un rato antes bromeó con el Obispo de Roma.
«Le traje el último disco de Charly García, ‘Random’, en el que hay una canción llamada ´La máquina de ser feliz’ que menciona al Papa. Como Charly no puede viajar, y yo venía en un viaje a Italia que empezó en la Calabria de mis antepasados, decidí traerlo», agregó el músico.
Los regalos incluyeron también otras dos obras clásicas: «Alma de Diamante», de Luis Alberto Spinetta y «Electroshock», de los Ratones Paraniocos.
«Todos se los traje en CD, menos el de Charly que también vino en vinilo. Entonces le dije: ‘este te lo dejo también en este formato, por si tenés tocadiscos’. Y el Papa se empezó a reír y me dijo que alguno hay por el Vaticano», resumió.
«La idea era traer cosas que simbolizaran la cultura del rock argentino. Las agradeció, y cuando le di el de Charly me dijo que le mandara un abrazo grande también», reveló luego.