Ariana Grande ha regresado con «No Tears Left To Cry», su primera canción nueva desde el atentado terrorista en el Manchester Arena, el 22 de mayo del año pasado, en el que murieron 22 personas y 59 resultaron heridas.
La canción, coproducida por Max Martin y coescrita con Savan Kotecha, encuentra a la cantante de 24 años optando por una introducción inspirada en el gospel, antes de abrirse paso a un estribillo contagioso.
El videoclip de la canción, dirigido por Dave Meyers (Kendrick Lamar, Camila Cabello), también se estrenó anoche, y alude al atentado en el Manchester Arena.
A principios de este año, el mánager Scooter Braun explicó el enorme impacto emocional que el hecho tuvo sobre la cantante. «Cuando descubrió que sus fans habían muerto, ella estaba… muy triste», reveló Braun durante una aparición en el podcast Big Questions with Cal Fussman.
«Lloró durante días, sintió todo, cada rostro, cada nombre. Cada emoción, porque así ella. Y lo que siempre recordaré es que dijo: ‘Si no hago algo, no soy quien digo ser para esta gente'».
En junio pasado, Grande encabezó el concierto «One Love Manchester», cuyas ganancias se destinaron a las víctimas del atentado a través del We Love Manchester Emergency Fund.