Lemmy Kilmister, el fallecido líder de Motörhead, tendrá su primer homenaje en la ciudad de Barcelona, que contará con una procesión que incluirá el paseo de un busto gigante sobre una plataforma, que será cargada sobre los hombros de los fans.
«Desde pequeño he asistido a muchísimas procesiones en los pueblos de mis padres, y siempre me ha llamado mucho la atención ese sentimiento, ese fervor de la gente, tan involucrada”, explicó Sergio Pozo, uno de los organizadores del evento titulado “Lemmyssyou” (“Lemmy te extrañamos”), citado por el diario ABC.
El homenaje del 28 de diciembre, a un año de su muerte, empezará con una procesión en la que se paseará un busto de tamaño real con la imagen del compositor de “Ace of Spades”, desde la sala Rocksound hasta la Sala Boveda, donde habrá un concierto tributo a cargo del grupo de covers Motörhits.
Lemmy es considerado uno de los padres del heavy metal y el hard rock, cuando en 1975 fundó Motörhead, grupo con el que editó 22 discos de estudio y visitó la Argentina en cinco oportunidades.
Con notable influencia en el rock local en bandas como Hermética o La Renga, en el exterior Lemmy forjó amistad con músicos como Ozzy Osbourne o los integrantes de The Ramones, a quienes les dedicó el tema «R.A.M.O.N.E.S.».
Dueño de una personalidad despreocupada y desfachatada, el bajista y cantante de voz ronca tuvo que cambiar el whisky, bebida predilecta, por el vodka, debido a su avanzada diabetes, al punto de que una bodega sueca creó el whisky Motörhead para diabéticos.